
Estoy en sequía. Al igual que la mayoría de las represas y embalses de este país. Llego el racionamiento a mi creatividad. Desde que llegó el verano que no produzco textos. En sequía no hay agua para mis generadores de electricidad, por ende, cero iluminación para escribir.
No hay electricidad ni siquiera para una pequeña sinapsis en mis neuronas.
No tengo temas, por lo cual tuve que acudir a mi no tema para escribir sobre eso, es un caso de metadesiluminación. O algo así.
El punto es que quizás han pasado muchas cosas en estos días que valen la pena recibir unas palabras de mi parte, pero estoy lo suficientemente apagado para no percatarme de aquellos segundos de genialidad que te regala la vida para poder hablar de ellos, o quizás es peor, y definitivamente perdí mi capacidad de hablar hueas.
Tratare de seguir estimulando mi capacidad imaginativa para seguir alimentando este inerte sitio, pero no puedo prometer nada. Pero será difícil, producto de mi teledependencia no puedo concentrarme más de 5 minutos en escribir algo, y tampoco con las constantes interrupciones de msn no colaboran mucho… pensando en el ostracismo como una salida.
Será hasta una próxima parada. O por lo menos hasta que un superávit de ideas logre llenar las represas creativas de mi inconsciente desconsiderado.
Pd1: ah, y ahora facebook también ocupa mi tiempo
Pd2: la idea de este texto no fue mia.